Mercurio en Casa IX

Subió al avión muy niña, muy pequeña y bajó en otro país cuando no sabía todavía ni saludar en su propio idioma. Y los cambios no parecieron afectarla. Llena de curiosidad conoció todo ghetto y las culturas venían hacia ella sin prejuicios ni problemas. Pudo reconocerse entre nuevos amiguitos como una más de esa ciudad.  La escuela, las primeras palabras, escribir, leer fue normalmente aprendido.
Un año despues el avión partió hacia otra ciudad con otro idioma y otra forma de vida. Cuando bajó, escuchó tonadas y formas de hablar que otra vez inmediatamente adquirió. No hubo límites para su aprendizaje, ni trabas ni nada que la perjudicara a pesar de los constantes movimientos de casa que sufría.
Podía aprender todos los idiomas del mundo, todo dependía a dónde aterrizaba con cada avión. Ni siquiera importaba la cantidad de tiempo que tenía para asimilar tanta palabra.  A los padres les traducía en cada lugar las preguntas que no sabían formular. Y cuando se expresaba decía las cosas más analizadas a pesar de su corta edad. Hoy es una mujer sin fronteras, parte del mundo, esté donde esté.... enseña a niños idiomas y sigue estudiando las filosofías de existir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario