VIEJO ARIES

A los 70 años ya no pone el puño en la pared, ni rompe vasos, ni te grita lo traumático, ni siquiera discute, ni les pega a las personas, ni maltrata a las mujeres. Fueron años de topar a lo carnero.
Y no es porque tenga más paciencia ni porque esté más sensible al paso del tiempo. Es solo por agotar toda la ira que tenía su propia existencia;
Está en calma porque expresa otras cosas de la fuerza, la actividad en la vejez, nunca enfermo, viejo hábil e independiente.
Ahora y casi siempre recuerda ofendido su carácter agresivo y no olvidó nada.