Un día Tauro...

Habló lento, sagaz. La conversacion fue tranquila. Se lo notaba gozando escuchar y contestar.
Las palabras envolvieron al publico. La entrevistadora hostigó, pero él sostuvo su gesto siendo algo agradable.
Cuando se fue del lugar, caminó con gracia hasta el cortinado y chocó violentamente con alguien. Se avergonzó al tirar a la persona al suelo y pisotearla hasta correr las cortinas.
Siguió caminando y se encerró en camerinos. Sacó una botella del bolso y llenó un vaso de ron.
Inmediatamente golpearon su puerta, después oyó comentarios....ni contestó.
Dos vasos más... un cambio de zapatos y perfume.... abrió la puerta.
- permiso, estoy apurado- dijo serio.
Hubo fotos, cámaras, micrófonos, un acorralamiento. Dijo - estoy bien, dejenme caminar-. Su bolso se golpea con la gente, caen gotas, liquido. -¿Qué querés vos? querés saber lo que pienso? yo no quiero contestar preguntas ahora, hablé dos horas con esa mujer. Ahora, permiso-