Le pide a su hermano que le preste la bicicleta para dar una vuelta para distraerse un rato. Es normal que la respuesta sea una negativa, pero esta vez surge la diferencia y le dice que la use con cuidado y vuelva pronto. Ella se encuentra con el novio y le da la bicicleta para ir a comprar drogas a unas pocas cuadras, con la modalidad rapidez y facilidad, lo espera mientras también da vueltas manzanas con impaciencia. A la hora vuelve su novio caminando, le dice que le tendieron una trampa y que le robaron la bicicleta, aunque aparece sin rasgaduras ni golpes a la vista. Se queda con él dos horas más sin hablar de nada pero insultando a todos los costados y vuelve a su casa en donde la espera su hermano para recibir su bicicleta. Apenas lo ve, quiere intentar evitar el tema pero al mirarlo a los ojos en silencio se da cuenta de la imposibilidad de callarse y le cuenta que se la robaron mintiendo que además sufrió un golpe en la cadera cuando la corrieron dos chicos mientras andaba por una plaza cercana y la empujaron. El hermano no le cree pero se preocupa.
La madre más tarde pregunta al hijo por la bicicleta que se guarda siempre en la habitación de servicio de la casa y el hijo le contesta que se la robaron cuando la dejó con un candado en la puerta de la casa de su novia. La madre se queja de que su novia no le deje entrar la bicicleta. El hijo le pide que no se queje de nada porque quien la compró fue el con su dinero.
La madre más tarde pregunta al hijo por la bicicleta que se guarda siempre en la habitación de servicio de la casa y el hijo le contesta que se la robaron cuando la dejó con un candado en la puerta de la casa de su novia. La madre se queja de que su novia no le deje entrar la bicicleta. El hijo le pide que no se queje de nada porque quien la compró fue el con su dinero.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminar