Se fue diluyendo esa estructura que soportaba del otro. Se fue deshaciendo en partículas el sentimiento que veía entre ellos.. Ella sentía su corazón vagando por los confines del más allá mientras él se encerraba en cajitas de cristal que aplastarían sus sueños. Sin peleas ni resistencias, ella pidió antes de escapar atrás de las
fantasías, que se fuera de su casa y separarse para siempre. El descontento fue calmo y la ilusión fue al olvido.
Ella ahora sentía un alivio y la expectativa tan elevada generó un encuentro con alguien. No debía estar sola un alma sedienta de altruismo y sinceridad. Y pronto conoció el amor con descaro. Disipando toda confusión, bailó con cada palabra y sintió la paz de la verdad entre dos personas. Toda la ternura que pudiera conocer del mundo estaba visible ante sus ojos como burbujas en el aire cubriéndola de imágenes y el corazón pudo abrirlo al sol. Así toda herida se curaba; y por amparo de las almas unidas, esta unión no podría ser disuelta, porque sueña la eternidad.
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