Ascendente en Capricornio

Sus huesos firmes, su espalda desde niño derecha y fuerte, con la postura de soldado con escudo, solitario y dispuesto a someterse para escalar peldaños, así crece paulatinamente cada mañana que se levanta a vivir sus obligaciones. Con el tiempo como único amigo, aguantó cada incertidumbre y pena, dejando que nada lo estorbe más que sus propias exigencias. Y un tiempo de tristeza provoca la reclusión total para volver a ver en lo material la razón de su existencia. Y asi controla al mundo acumulando trabajo y esfuerzo para lograr el objetivo frío de acompañar su espalda erguida con su constancia  en algo que lo llevará a tener más de lo que antes tuvo. Y seriamente alcanzará niveles de comodidad y dinero que podrá llevar en sus hombros hasta el fin de sus días. Aunque la soledad alguna vez lo critique, no será un problema, porque tiene mucho trabajo que cumplir antes que pensar en las penas.