Luna en el Ascendente

Al aparecer se ve una cara bien redonda, los ojos incrustados en ese círculo, nariz y boca acompañando. No serían nada sin esa luna llena que representa. Con su actitud amena de mujer agradable,  cree ser demandada y es ella quien solo lo siente. Cree no tener caracter pero es que se adapta a todo. Y no decide casi nada. Cuando se anima es su intuición que no se equivoca. Su prestancia es la de quien anhela pero no arremete. Su expresión deja impresión,  se va armando  a la vista de los demás. Va adaptandose a todo lo que va captando hasta que necesita mucho de alguien que la sienta también. Si pudiera agilizar sus movimientos, darle más dinamismo a su ciclotimia torturante, tomar la iniciativa. Espera ser llamada, observada, atendida y el capricho en sus labios al sonreir o fruncir el ceño. Y podría ahora levantarse de aquel lugar que no le agrada y plantar sus puntos de vista, pero va a ser suave y tierna, va a dolerle la panza como fuero íntimo y dirá que se siente descompuesta,  que debe retirarse.